Una imagen de la nebulosa Pata de Gato (NGC 6334) obtenida gracias al telescopio espacial Spitzer de la NASA muestra burbujas gigantescas en la región de formación estelar, informó este martes la agencia espacial en un comunicado. La nebulosa Pata de Gato se denomina así por las características que crean la impresión de una huella felina.
La imagen fue producida utilizando los datos de la cámara de matriz de infrarrojos (IRAC) y el fotómetro de imágenes multibanda (MIPS) que se encuentran a bordo del Spitzer.
El MIPS recoge un ‘color’ adicional de luz en el rango infrarrojo, que revela las características de color rojo, creadas por el polvo que se ha calentado por el gas caliente y la luz de las estrellas cercanas.
Enmarcadas por nubes verdes, las burbujas rojas brillantes son la característica dominante en la imagen. Después de que el gas y el polvo dentro de la nebulosa colapsen para formar estrellas, estas a su vez pueden calentar el gas presurizado que las rodea, haciendo que se expanda al espacio y cree burbujas.
Las áreas verdes muestran lugares donde la radiación de las estrellas calientes chocó con moléculas grandes llamadas ‘hidrocarburos aromáticos policíclicos’ (PAH), que provocan su fluorescencia.
Los filamentos negros que corren horizontalmente a través de la nebulosa son regiones de gas y polvo densas, a través de las cuales no puede pasar la luz infrarroja del telescopio. Estas regiones densas pronto podrán ser sitios donde se forme otra generación de estrellas, según informa la agencia.
La NGC 6334 se ubica en la Vía Láctea, en la constelación de Escorpio. La nebulosa está a una distancia de entre 4.200 y 5.500 años luz de la Tierra y se estima que su diámetro es de 24-27 parsecs (80-90 años luz).
Fuente: Actualidad RT